A partir de una volumetría definida, se propone reordenar las edificabilidades para explorar las posibilidades de un modelo mixto entre la manzana cerrada y la edificación abierta. Se aprovecha para ello la ambigüedad que ofrece la manipulación de las esquinas mediante su vaciado en determinados puntos, con el fin de reforzar la relación del interior de la manzana con su entorno. Las viviendas, de 2,3 y 4 dormitorios, son pasantes a lo largo de una profundidad de 12 metros que permite disponer espacios de día entre la calle y el patio ajardinado, con terrazas a ambos lados. Se propone la posibilidad de que dentro de cada vivienda determinadas estancias puedan incorporarse a la zona de día: la cocina con el comedor o una habitación-estudio con la zona de estar. Estos espacios “integrables” permiten viviendas adaptables y más cualificadas espacialmente.

promotor : IVVSA (instituto valenciano de vivienda)
arquitectos : marta orts – carlos trullenque